El propósito de esta carta es mostrarle mi descontento con el trato recibido en el establecimiento de su propiedad por el operario encargado de cobrar.
El día 13 de junio del presente año, el citado operario, cuando se estaba ocupando de embolsar una docena de sardinas que me habían costado encontrar en la tienda, debido a su pésima ubicación, se refirieron insultantemente a mí protestando por el olor del pescado que compraramos.
La mayoría de los clientes que se encontraban en la cola para pagar en la caja fueron testigos de la falta de respeto. El grupo de personas que me acompañaba y yo mismo nos sentimos gravemente insultados. Una pareja de ancianos sufrio un ataque de ansiedad al observar lo sucedido.
Por todo lo expuesto, como clientes de su negocio solicitamos una reunión con usted acompañado del director de la zona para arreglar el problema expuesto.
Atentamente,
Germán Gutiérrez.
